lunes, 8 de febrero de 2010

La “teoría” inhumana de Malthus


Saludos a todos mis amigos de la comunidad Ethos y a todas aquellas personas que gustan darse una vuelta por aquí de vez en cuando para leernos, comienza otra semana y otra oportunidad para compartirles otro granito de conocimiento. Primero, les presento un análisis breve que inició como una curiosidad y después se convirtió en tema de una tarde de conversación entre un estimado profesor y un servidor, el propósito es compartir aquí con ustedes el resultado de esa sesión, esperando además sea útil para los propósitos del foro.

Entrando ya en tema, todo el mundo estuvo al tanto de la situación de miseria que se vivió y persistió y que aún persiste hoy en ese pequeño país del Caribe, las imágenes y la información dieron la vuelta al globo por los medios de comunicación que, en mí opinión, se encargaron de presentarla al auditorio hasta el hartazgo. Desde entonces e inclusive antes de lo sucedido, la mayoría de los gobiernos mundiales, empresarios, académicos y el público en general, se han obstinado en demostrar esta condición de “miseria” como producto de leyes eternas y naturales del universo. El autor de la teoría más reaccionaria en este sentido fue formulada en 1798 por el inglés Thomas Robert Malthus. Su tesis fundamental está fincada, según él, desde el surgimiento de la sociedad humana, donde la población aumenta en progresión geométrica (1, 2, 4, 8, etc.), mientras que los medios de subsistencia, limitadas por las riquezas naturales, aumentan en progresión aritmética (1, 2, 3, 4, etc.). Esa es, según Malthus, la causa de que grandes masas humanas se consideren “sobrantes” en la Tierra, de que no puedan encontrar trabajo ni alimento, la cual fue una conclusión basada en cálculos estadísticos totalmente falsos.

Este es Malthus (1766-1834)

La miseria entonces, podía explicarse con el sobrante de “bocas” y la insuficiencia de medios de subsistencia. A juicio de Malthus, el proletario no puede liberarse del paro forzoso de las actividades productivas, de la miseria y del hambre liquidando el régimen capitalista, sino mediante el celibato y la reducción artificial de la natalidad. Malthus consideraba, además, que las guerras, las epidemias, las catástrofes naturales, etcétera, eran beneficiosas para la humanidad, ya que, con eso, se erradica el “sobrante” de población y equilibran la necesaria proporción entre ésta y las existencias de medios de sustento. Pese a todo, el absurdo de la “teoría” de Malthus, fue bien aceptada por la burguesía con entusiasmo y júbilo, ya que permitía justificar todas las llagas del capitalismo. Partiendo de dicha teoría, se podía achacar el desempleo al aumento numérico absoluto de la clase obrera, excesivamente rápido. El problema fundamental de la tesis de Malthus se centró en vendarse los ojos, ignorar y no reconocer en su tiempo al mismo sistema capitalista de producción imperante en la sociedad que se encontraba en ese entonces en pañales, con sus ansias de acumulación de capital, quien producía el paro forzoso, la miseria y el hambre de las masas trabajadoras que migraban a las urbes como la principal causa, sino que hizo todo lo contrario; lo aplaudió y lo reconoció como el nuevo sistema “vanguardista” que generaba riquezas nunca antes vistas para las altas burguesías. Como resultado a su postura, las fuerzas progresistas del mundo entero comenzaron una lucha enérgica contra la “doctrina” malthusiana. Sin embargo, y desde entonces, el mundo capitalista contemporaneo no ha cesado de hacer propaganda respecto al maltusianismo. Donde mayor difusión ha adquirido esta “doctrina” ha sido en los Estados Unidos, pues para darles ejemplo claro e irónico de la grandeza del pueblo Americano; William Vogt, quien fuera el director de “Planned Parenthood Federation of America” (por allá de los años 50 del siglo pasado), institución que tiene como propósito entre otras cosas, el respetar y preservar los derechos hacia la vida, escribió en el año 1948 un libro titulado El camino de la salvación, en el que afirma categóricamente que en nuestro planeta no pueden vivir más de entre 500 a 900 millones de personas, que además son “gente de sobra” y que ese excedente de personas deberían de ser exterminadas, ésta postura malthusiana no sólo es bien aceptada en universidades norteamericanas actualmente sino que es parte del programa de estudio de muchas otras universidades alrededor del globo incluyendo las de nuestro país.

Incluyo el programa de estudio de un par de universidades de nuestro país, dejo unas ligas:

http://www.cucea.udg.mx/oferta/prevista.php?clave=EN133

http://www.depfe.unam.mx/especializaciones/HistoriadelPensamiento.pdf

Hasta aquí y después de la posible roña que les debió de haber causado a algunos lectores, quiero concluir invitándolos a la reflexión y tomar en cuenta lo siguiente: ¿la verdadera causa del desempleo masivo, de la miseria y del hambre se encuentra precisamente en el número de personas existentes?, o si ¿verdaderamente existen recursos naturales y de subsistencia limitados como afirmaba Malthus en un principio?, pues principalmente yo pienso que el problema aquí es que el capital, los bienes, los sistemas de subsistencia, la oportunidad de competencia, etcétera, se encuentran mal distribuidos, acaparados y en tan sólo pocas manos, pertenecientes generalmente a un número pequeño de particulares connacionales y extranjeros (los cuales hasta podría contar con una sola mano), mientras países como esa pequeña isla del Caribe son “victimas” de ésa inadecuada distribución de los medios necesarios para la vida y desarrollo, mientras que por el momento, la caridad se convierte en la solución divina pero temporal, porque un kilo de arroz o frijol no cambiará en nada la situación actual y donde sólo se convierte lo sucedido, de una catástrofe,a un hecatombe.

6 comentarios:

Ismoísta dijo...

Eeeee ooo e e e o.
Fíjate na'más, esta entrada sí me gustó, y lo digo de buenas Achellandro, mucho más leíble que tus entradas anteriores, sigue echándole las ganas, y yo seguiré comentando.

Algo que sí no me gusta es que se invite a la reflexión haciendo preguntas, uno normalmente reflexiona acerca de lo que lee (excepto cuando no le interesó en lo absoluto), y pues sí, debe haber unos cuantos a los que se les necesite invitar porque si no, no lo hacen, pero eso de hacerte preguntas para hacerte saber sobre qué reflexionar se me hace que subestima al lector.

Christian O. Grimaldo dijo...

Ahhh los clásicos! Fer me hablaba y me explicaba muchas cosas de todas sus ideas, siempre dan de que hablar.

La inhumanidad se encuentra en todas las disciplinas, la onda Watsoniana en psicología se empareja con este mismo discurso que parece situarlos en el papel de Diosecitos que saben cómo controlar el caos que nosotros simples mortales no podemos comprender, hablemos de guerras, de sistemas económicos, de modelos de control, sistemas de modifiación de actitudes e influencias sociales, el punto es que la "científicidad" de lo que decían es lo que dotó de valor real de sus ideas, por eso si se habla en terminos estadísticos hay que tomar sus postulados como algo serio, la ciencia y sus preceptos... al final son cuestiones de discurso y poder, que le guste a quien le guste no se desligan.

Lo que me pregunto más bien sería si esa ciencia que tan al servicio de la humanidad ha estado siempre realmente nos ha servido para fines comunes.

Pinche ciencia...

Sobre la cuestión de los recursos limitados, yo creo que si están limitados, hay pocas cosas que no están limitadas en nuestra realidad, el problema considero que estriba en el hecho de que está limitada la capacidad de racionarlos y distribuirlos y más aún, el problema central está en el hecho de QUIEN limita esas capacidades. Y NO, la respuesta no es nada más los empresarios, los magnates o los medios de comunicación (pobrecitos medios, son los culpables de todo hoy en día) la verdad es más compleja que eso y la respuesta no es única, pensar que es una sería ser igual de inhumanos que Malthus.

¡Me gustó tu entrada!

Unknown dijo...

Interesante y polémica entrada Alejandro.

En primer lugar creo que los recursos si son limitados, más no escasos como nos lo han vendido los neoclásicos, al menos no todos.

El planteamiento de Malthus me genera opiniones a favor y en contra. Estoy de acuerdo en parte porque creo que la naturaleza es lo único que tiende al equilibrio y tiene sus propios mecanismos de auto-ajuste, los humanos en un ataque de soberbia, hemos desafiado a la naturaleza inoculándonos contra enfermedades infecciosas, prolongando la esperanza de vida, preservando la vida en situaciones en las que de manera natural una persona moriría irremediablemente (cuadriplejias, nacimientos prematuros, enfermedades congénitas) incluso me atrevo a decir que con todo esto hemos interferido en el proceso evolutivo del hombre.

Sin embargo, me ataca el sentimiento humano y pienso que después de todo ése es el sentido de las sociedades humanas, buscar un mejor nivel de vida para todos los miembros de la sociedad.

En cuanto a la gente "sobrante", me parece que no hemos cruzado el límite en el que no se pueda alimentar a las personas con lo que se produce en el mundo. Hay alimento, pero vivimos en un sistema en el que se considera "racional" a un productor que busca maximizar sus utilidades, incluso si para esto debe almacenar o hasta destruir parte de la producción con el fin de crear una falsa escasez y venderla a un mayor precio.

Las economías de mercado (capitalismo) son ineficientes y lo único que están causando es que destruyamos nuestros recursos (limitados) naturales al mismo tiempo que la población crece. No me sorprendería que en un futuro no muy lejano alcancemos el punto en el que de verdad haya gente "sobrante".

Cuando sea mi semana prometo hablar de Adam Smith, otro clasicazo macabro.

Monstruo dijo...

¡¡Los economistas se apoderan de conexión Ethos!!

Jaja, buena entrada Don Achellandro. Ojalá sea placentera su semana.
Mi madre estaría de acuerdo con varios puntos que tocaste en la entrada, de hecho ella ya me había platicado de algunas cuestiones parecidas a estas; y que también le parece increíble cómo es que, doctrians como éstas, forman parte del estudio de universidades de gran renombre y no sólo aquí, si no en todo el mundo (o al menso en gringolandia). Pero pues... los clásicos son los clásicos, esos en cualquier rama del estudio hay que... estudiarlos.
Aunke precisamente los métodos que utilizan para establecer sus doctrinas sean altamente especulativos y escasamente científicos (o cientifistas, no sé si sería mejor decir.

Pero, pues la economía no es lo mío. Conmigo platiken de frijoles o de tortas.

浮雲 dijo...

Gracias por los comentarios, se me hace difícil contestarles a todos pero aquí voy:

Primero: gracias por el comentario Alain, yo también lo digo de buenas; me alegro que te haya gustado la entrada y la invitación a la reflexión y comenzar un debate, a realizar una fuerte crítica social y jamás fue con la intención de subestimar a ninguno de nuestros lectores, una disculpa si la impresión que te llevas fue otra.

Segundo: Christian, tienes razón al mencionar a esos "diocesitos" ¿que no al final de cuentas son por unos cuantos de esos pensadores que nuestra sociedad se comporta o se encunentra en la actualidad?, sólo por citar algunos: Einstein, Hitler, Bush y la lista sigue, por lo que no me gustaría tomarme sus aportaciones como dogmas.

Tercero: Jesús Abarca (¡cuánto tiempo viejo, me alegra verte por aquí!), te doy la razón por el comentario del uso "racional" de los recursos y la especulación de mercado, porque empatizo contigo ya que ambos formamos parte de esa doctrina Lopez-Arciana.

Cuarto: Agradecido por el comentario (un saludo a tu queridísima madre también), lo triste es que no sólo nos pasa a nosotros en nuestra carrera, hay más de alguna doctrina nefasta y pedante que todos en nuestras carreras tenemos que estudiar, pero los clásicos son los clásicos al final de cuentas, saludos.

Unknown dijo...

Mas que una doctrina Lopez-Arciana (para quien no lo sepa, Lopez Arce es un profesor de Economía Política con fuertes inclinaciones Marxistas) es una crítica a la economía política clásica muy a la Marx :).

Las corrientes económicas actualmente dominantes son descendientes directos de los clásicos, específicamente de la escuela inglesa y el marginalismo austriaco. Si tomamos en cuenta que todo se está yendo al carajo creo que lo más sensato es buscar las verdaderas raíces del problema en lugar de perder el tiempo en discusiones como Keynesianismo vs neoliberalismo.

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